Cómo organizar tu tiempo de estudio en 10 claves

¿Quieres saber cómo organizar tu tiempo de estudio? En InfoEducación  te diremos las claves que tienes que implementar para tener más tiempo de realizar tus actividades estudiantiles y otras tareas personales. Tener una planificación horaria es una de las claves del éxito en muchas áreas.

Muchos alumnos tienen problemas a la hora de estudiar debido a que cometen el error de abrir el libro y aprenderse los textos un día antes de un examen. Esto no es la manera correcta de estudiar. A veces el problema es que al no tener organizado el tiempo de estudio, los trabajos y exámenes se acumulan y terminan realizando todo a horas de presentar las pruebas o proyectos.

Hay una gran infinidad de maneras en las que puedes organizar tu tiempo de estudio. Hoy te traemos los trucos que les han funcionado a cientos de jóvenes. Estos te servirán también para presentar oposiciones y básicamente pueden adaptarse a cualquier ámbito.

Muchos dicen que hay que organizar nuestro horario en tres franjas de 8 horas; es decir, 8 horas para dormir, para trabajar o estudiar y ocio. Pero es muy difícil cumplir este plan; siempre hay inconvenientes y obstáculos que nos impiden establecer una agenda así. Sin embargo, no significa que sea imposible ordenar tu horario.

Es necesario hacerlo para evitar caer en el caos, el estrés y la ansiedad. Los malos hábitos de estudio son muy comunes y son parte de la causas de los resultandos negativos en la pruebas. Como dijimos antes, hay formas de remediar esto y hoy te diremos en detalles los pasos que debes realizar.

Organiza tu tiempo de estudio en 10 claves

Una de las formas de rendir mejor en la pruebas y tener las máximas puntuaciones es tener un meticuloso plan de estudio. Calcula y establece las horas que le dedicarás a cada tema. Para obtener resultados positivos debes evitar modificar este horario a menos que sea por algo esencial; además de cumplirlo y no dejarte llevar por las distracciones.

Paso 1: El calendario

Es el pasó más básico pero vital a la hora de empezar a organizar el tiempo de estudio. Gracias al calendario podrás ver cuántos días te quedan para presentar la prueba o el proyecto. Puede ser digital o en papel; nosotros te recomendamos el uso del calendario del móvil porque puedes establecer una alarma que te recordará las actividades que tienes que realizar.

Lo mejor del calendario es que puede utilizarlo para cualquier ámbito de tu vida. Si tienes trabajo y a la vez estudias, esta herramienta se convertirá en un gran aliado tuyo. Apunta eventos extracurriculares, citas, quehaceres y mucho más.

Paso 2: Rutina de estudio

Organizar tu tiempo de estudio se puede volver una actividad rutinaria y finalmente un hábito. Tiene que ser diaria para que te vayas acostumbrando a realizar las actividades según tus propios biorritmos. Hay muchas personas que son más productivas en las mañanas, otros en la tarde, en la noche e incluso en la madrugada.

Cada persona es diferente por lo tanto, te aconsejamos que no intentes crear la misma rutina que algún compañero. Lo que le funciona a otro puede que no te sirva a ti. Si esto te llega a suceder, no tienes que sentirte mal o menospreciar tus capacidades; quizás ese horario no es el adecuado según tu ritmo.

Tienes que analizar cuál es el momento del día en el que eres más productivo. Cuando lo identifiques, establece tu rutina conforme a esas horas e intenta replicarlo cada día. Llegará un punto en el que te acostumbrarás a esa rutina y lo realizarás de manera automática; es decir, lo volverás un hábito.

Tú mismo te darás cuenta que el horario ya no te resultará tan pesado o poco motivador.

Paso 3: Prioriza objetivos

Hay actividades y tareas que tienen que ser cumplidas con mayor rapidez; es por esto que tienes que darles una importancia mayor. Es cierto que los humanos podemos realizar varias tareas al mismo tiempo, pero para estudiar esto no es recomendable. No te vas a concentrar adecuadamente y el proceso de aprendizaje empieza a volverse complejo.

Paso 4: Objetivos a corto y largo plazo

Tu tiempo de estudio puede divisarse en la realización de objetivos a largo plazo y corto plazo. Por ejemplo: Tienes que aprobar unas oposiciones dentro de unos meses, este sería el objetivo a largo plazo; no obstante, hay que desglosarlo en pequeñas actividades que te llevarán a la meta establecida.

Siguiendo con el ejemplo anterior, un objetivo a corto plazo puede ser estudiar matemática durante una semana. Tienes que ser realista a la hora de fijar los horarios. Si tienes que aprenderte 40 temas, lo ideal es que estudies 4 cada semana; al mes ya tendrás una parte del temario listo.

Paso 5: El descanso

Aunque no lo creas esto es súper importante; estudiar sin descanso lleva al agotamiento. Por eso te recomendamos tomar una pausa cada cierto tiempo, recuerda que este respiro no puede durar mucho tiempo porque puedes llegar a perder el ritmo de aprendizaje.

Paso 6: Voluntad y motivación

Cuando estés cansado de seguir el horario, recuerda el objetivo final. La actitud positiva es parte fundamental del tiempo de estudio. Motívate a superar el aburrimiento; todos hemos pasado por esta etapa pero hay que superarla ya que puede influenciar en tu modo de aprendizaje.

Paso 7: Planificar con antelación

El tiempo de estudio tiene que ser establecido con meses de antelación, sobre todo para pruebas importantes como las oposiciones o aprobar un máster. Establecer un horario una semana antes, no te ayudará y puede que no apruebes. Lo mejor para recordar todos los temas, es repasar de manera constante.

Paso 8: El lugar ideal

El espacio de estudio debe ser un lugar que consideres que puedes concentrarte sin interrupciones. Muchos estudiantes prefieren realizar su proceso de aprendizaje en bibliotecas o en sus cuartos. Decide cuál es el sitio ideal para ti. Es de vital importancia que sea un sitio tranquilo.

Paso 9: Evita distracciones

Cuando estés estudiando debes evitar utilizar el móvil porque puedes distraerte con mucha facilidad. Ya sea respondiendo mensajes a compañeros, jugando con aplicaciones, revisar las redes sociales, entre otros. Del mismo modo pídeles a tus familiares y amigos que no te interrumpan durante el horario de estudio.

Si eres de las personas que escuchan música para concentrarse mejor, te aconsejamos colocar ritmos suaves, ambientales y melódicos. Preferiblemente sonidos de naturaleza, esto es para evitar que estés más pendiente de las letras de las canciones que del tema a estudiar.

Paso: 10 Coherencia

Clasifica los temas por su dificultad y dedícales más tiempo a las que sean más complejas; tales como matemática, física o química. Te recomendamos empezar con las materias más complicadas y luego con las más fáciles.

¿Te sirvieron estos consejos? Respóndenos en la sección de comentarios y no olvides compartir el artículo en tus redes sociales.